“La inversión privada está en el mismo nivel que en los noventa”
La Política Online. Por Ignacio Ostera
El debate por cómo lograr el desarrollo de la economía argentina fue el eje del último panel del
IV Congreso de Aeda, titulado “Los desafíos del escenario productivo: industria, energía y crecimiento económico”.
La discusión contó con la presencia de los economistas
Eduardo Basualdo de FLACSO y director en YPF,
Paula Español (Aeda),
Fernando Porta del Centro Redes y
Leonardo Boto de Inprotur, organismo dedicado a estimular el turismo.
Las exposiciones de Basualdo y Español destacaron el impulso al desarrollo industrial de los gobiernos kirchneristas y las políticas que pudieron implementarse gracias a los fondos de la Anses. Mientras tanto, Boto habló sobre el desempeño del turismo en la economía, una rama que suele estar ausente en los análisis macroeconómicos.
Quizás quien llevó la voz más crítica fue Porta, especialista en economía internacional, quien advirtió por “la exacerbación de la puja distributiva” del 2008 a la fecha. Y lanzó críticas por lo que considera “una tasa de desocupación estructural muy elevada y una tasa muy alta de informalidad”, que en estos años de crecimiento no pudo ser revertida.
Luego puso la mira sobre la concepción de que “hay que estimular la demanda agregada porque la oferta siempre se acomoda”. “Eso no pasa necesariamente”, afirmó, “sobre todo en una economía con problemáticas estructurales como la argentina”.
“Hubo un cambio en los mecanismos de distribución, pero las bases del modelo permanecen intocables”, aseguró el director del centro Redes. Y abogó por “la necesidad de modificar el perfil productivo” del país.
Al hablar del componente de la inversión, mostró que aumentó respecto al PBI pero exclusivamente por una mayor injerencia del estado. “La inversión privada está en el mismo nivel que los 90’”, lanzó el especialista en Economía Internacional. Y ahí descartó la hipótesis de la “seguridad jurídica” que utiliza gran parte de sus colegas. “Es tautológico”, dijo. La respuesta debe buscarse, según Porta, en “la naturaleza de los agentes y sus prácticas” y la “insuficiencia financiera”.
También disintió con la política del freno a las importaciones, que “pueden servir en el corto plazo por algun tema puntual de la balanza de pagos, pero en el largo seguramente sean ineficaces”.
Sector industrial y turismo
En su turno, Español remarcó el desempeño del sector industrial, donde se destacaron “todos los sectores, no sólo el automotriz”, con una fuerte inserción en el mercado mundial. “Eso significa que 1 de cada 4 pesos de la industria eran dedicados al exterior”, explicó.
“Hubo nuevos sectores y nuevos destinos”, reforzó.
En ese sentido fue la exposición de Leonardo Boto, quien mostró los exitosos números del turismo de los últimos diez años. Boto indicó que la Argentina se convirtió en el principal destino de América Latina, con una suba explosiva del 102%. “Esto representa el 1,59% del PBI”, contó el director del instituto.
Además, la actividad registró un incremento del 362% dentro del país.
La disputa con los sectores concentrados
Por su parte, Basualdo subrayó que el 2008 marcó un quiebre en el modelo kirchnerista, cuando “sectores dominantes buscaron subordinar al gobierno”, durante el conflicto de la 125. “Se hizo más sólida la alianza entre los propietarios de la tierra y una fracción del capital extranjero”, disparó el economista.
Es que a diferencia del primer gobierno de Néstor Kirchner, en ese entonces el contrincante era “el capital financiero y sus representantes políticos, los organismos de crédito”, sostuvo el investigador de FLACSO.
Por último, elogió la política oficialista “de corto y largo plazo” por medio de los fondos de la Anses, que permitieron financiar la AUH y el plan Repro del 2009 para mantener el empleo. Y guardó sus últimas palabras para la expropiación de YPF y la resolución 1227 que otorga un mayor poder estatal sobre los recursos petrolíferos.