Matriz energética de Bolivia sería modificada hasta el 2030

El cambio de la matriz energética en el país impulsará una mayor producción y consumo interno de gas natural en los sectores residencial, industrial, comercial y transporte, a través de los programas de instalación de gas domiciliario y de GNV.

Hasta el año 2030 el Ministerio de Hidrocarburos y Energía prevé modificar la matriz energética del país en su totalidad, orientada básicamente hacia un mayor consumo interno de gas natural en los sectores residencial, industrial, comercial y transporte para sustituir el consumo de hidrocarburos líquidos que actualmente son subvencionados como el diésel oil y el GLP, de acuerdo a explicaciones de Jhon Vargas, uno de los autores de la Estrategia Boliviana de Hidrocarburos y actual presidente del directorio de YPFB Refinación.

De acuerdo a estimaciones de Vargas, el avance en el cambio de la matriz energética en Bolivia, que se expresa principalmente a través de los programas de instalación de gas domiciliario y de Gas Natural Vehicular (GNV) en el marco de una perspectiva inmediata, es del 50% aproximadamente.

“Este cambio de matriz energética impulsará una mayor producción y consumo de gas natural como energía interna, no sólo por ser un recurso natural abundante en el país, sino por ser un energético más económico y limpio en comparación a los hidrocarburos líquidos, lo cual irá en beneficio de la economía de la población, del medio ambiente y hará más competitiva la industria nacional y otros sectores productivos que sustituyan otros combustibles más caros por gas”, establece la Estrategia de Hidrocarburos, como documento referencial para el cambio de matriz energética en Bolivia.

En otro orden, Vargas refirió que a largo plazo el Plan Nacional de Desarrollo Energético 2008-2027 estipula el uso diversificado de energías alternativas como la hidroeléctrica, eólica, geotérmica y solar; situación que permitiría una mayor producción hidroeléctrica, mayor consumo de gas y de electricidad en Bolivia, la reducción del uso de GLP, haciendo posible su exportación y la reducción de importaciones de diésel.

IMPACTO SOCIAL

La masificación del uso del gas natural tendrá un importante impacto social en los hogares, refirió Vargas, debido a que el gas natural es más barato que la energía a la cual sustituye, el GLP.

“Un mayor consumo del gas natural significa un ahorro de energía, pero además un ahorro en el costo para las familias porque el precio subsidiado de la garrafa de gas es de 22,50 bolivianos (si se vendiera a precios de mercado superaría los 30 bolivianos), mientras una misma cantidad de gas domiciliario es de 17 bolivianos, entonces representa un ahorro significativo para las familias”, arguyó.

Adicionalmente, el gas domiciliario es más seguro para los usuarios que el uso de las garrafas de GLP, debido a que la normativa vigente exige que cualquier instalación sea debidamente inspeccionada y porque no necesita almacenamiento, lo que brinda al usuario mayor seguridad y comodidad de utilización, según la Estrategia Boliviana de Hidrocarburos.

Conversión de vehículos a gas natural alcanza un avance del 60%

Hasta el pasado 8 de noviembre, la Entidad Ejecutora de Conversión a Gas Natural Vehicular (EEC-GNV) ha logrado convertir más de 12 mil vehículos a GNV en todo el territorio nacional de los 20.000 previstos para el presente año, lo cual significa un avance del 60%, explicó el director ejecutivo de la entidad, Carlos Asport.

“En estos últimos meses se ha dado un incremento en el avance debido a que se ha coordinado de mejor manera con el sector del transporte, socializando el uso del GNV con los beneficiarios e incentivando la instalación de más talleres de conversión”, destacó.

De acuerdo a un comunicado del Ministerio de Hidrocarburos, en el mes de octubre se efectuaron 5.579 conversiones, lo cual significa un récord para la EEC-GNV, ya que en el mes de abril se habrían realizado 3 mil conversiones, cifra que fue incrementándose hasta superar los 5 mil vehículos.

De las 5.579 conversiones efectuadas a nivel nacional, 3.180 fueron realizadas en la ciudad de La Paz, 978 en Santa Cruz, 800 en Cochabamba, 311 en Oruro, 310 en Sucre, y el restante en las otras ciudades, agregó Asport.

Señaló además que hasta la fecha se invirtió alrededor de 84 millones de bolivianos en adquisición de equipos y pago de mano de obra para la realización de la conversión de vehículos a GNV, así como accesorios para los talleres de conversión.

“El 2012 se prevé convertir 34 mil vehículos a GNV y la meta es llegar a cubrir el parque automotor en su totalidad, que comprende 150 mil vehículos aproximadamente, hasta el año 2019”, anunció.

Ejecutan 49% del presupuesto para instalación de gas domiciliario

La Gerencia de Redes de Gas y Ductos de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) informó que hasta el mes de septiembre ejecutó el 49% de su presupuesto anual en la instalación de gas domiciliario en el país, de acuerdo a un reporte de la agencia informativa ABI.

En una entrevista realizada por ABI al jefe de planificación de la Gerencia de Redes de Gas y Ductos de YPFB, Cristian Camacho, el ejecutivo indicó que hasta septiembre se invirtieron 323 millones de bolivianos que equivalen a un 49%.

Asimismo, el Plan de Inversiones 2011-2015 de YPFB estima una inversión de 748 millones de dólares en la construcción de redes e instalaciones domiciliarias de gas natural en Bolivia.

Un informe de la Gerencia de Redes de Gas y Ductos de YPFB da cuenta de que este año se prevé implementar 80 mil nuevas instalaciones con la ampliación de redes para el suministro de gas natural domiciliario en los departamentos de La Paz, Oruro, Potosí, Chuquisaca, Santa Cruz, Cochabamba y Tarija.

El objetivo es transportar el gas natural desde el “City Gate” hasta los usuarios finales conectados a esta red. El City Gate comprende las instalaciones destinadas a la recepción, filtrado, regulación, medición, y despacho de gas natural a ser distribuido a través de los sistemas de redes, es el punto que separa el sistema de transporte del sistema de distribución, explica la Estrategia Boliviana de Hidrocarburos.

Asimismo, señala que las redes de gas natural se dividen en redes primarias, utilizadas principalmente para la distribución a usuarios industriales y estaciones de GNV y redes secundarias, utilizadas para la conexión de usuarios comerciales y domésticos.